Fotocopias del DNI por Internet: el “control” que no verifica identidades y puede acabar en sanción
¿Crees que pedir fotocopias del DNI online garantiza que la persona es quien dice ser?
La práctica está extendidísima. Desde trámites web hasta altas en servicios, pedir el DNI es el supuesto ‘control’ de identidad estándar. Pero el riesgo es grande: ni es prueba real ni protege a la empresa frente a fraudes. A menudo, circulan cientos de DNIs digitales en cientos de correos y plataformas poco seguras. ¿La consecuencia? Se abre la puerta a suplantaciones y a sanciones por incumplir el RGPD.
He visto organizaciones confiadas por tener cientos de copias archivadas, creyendo que así cumplen la normativa. Pero enviar, almacenar o tratar estos documentos sin cautela expone no solo a usuarios, sino al negocio. El hecho: la fotocopia no verifica absolutamente nada si la fuente no es fiable ni el sistema seguro. Las autoridades ya lo han advertido: pedir, almacenar o compartir estos archivos indebidamente puede suponer desde brechas hasta multas económicas relevantes.
El verdadero control de identidad va mucho más allá de una simple fotocopia digital. Identificar bien los datos tratados, minimizar riesgos y revisar los procesos de verificación no es opcional.
¿Estamos aún en el siglo de la fotocopia o toca evolucionar nuestra mentalidad sobre la identidad online?
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